
Buscan exportar productos mexicanos a Canadá
Empresarios de CEDA buscan exportar productos mexicanos como alternativa a los aranceles de Estados Unidos.
La iniciativa para exportar productos mexicanos a Canadá cobra una fuerza sin precedentes, impulsada por los empresarios de la icónica Central de Abasto (CEDA) de la Ciudad de México. Ante un panorama de incertidumbre comercial y la persistente amenaza de aranceles en el mercado estadounidense, los productores y distribuidores mexicanos han decidido mirar hacia el norte, identificando en Canadá a un socio comercial estratégico y confiable para sus mercancías. Esta audaz medida no es solo una simple reacción a políticas proteccionistas, sino que representa un movimiento calculado para diversificar los destinos de la vasta y rica producción agrícola nacional, garantizando así la estabilidad económica de miles de familias que dependen directamente de este vital sector.
La CEDA, reconocida como el mercado mayorista más grande del mundo, se posiciona como el epicentro de esta nueva e innovadora estrategia comercial. La calidad superior de productos emblemáticos como el aguacate, el jitomate, los pimientos y las bayas mexicanas es apreciada globalmente, y el mercado canadiense representa una oportunidad de oro para consolidar su presencia internacional. Aprovechando el marco regulatorio del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), los empresarios se enfocan en establecer canales logísticos eficientes y en cumplir rigurosamente con las normativas fitosanitarias de Canadá para asegurar un flujo comercial constante, robusto y mutuamente beneficioso. El éxito al exportar productos mexicanos a este nuevo y prometedor destino no solo fortalecerá la balanza comercial del país, generando un mayor ingreso de divisas, sino que también reducirá significativamente la vulnerabilidad de la economía nacional frente a las volátiles decisiones de su principal socio comercial. La Secretaría de Economía y otros organismos gubernamentales tienen el rol crucial de facilitar acuerdos bilaterales y simplificar los trámites. En definitiva, esta visión de la Central de Abasto demuestra la resiliencia y la capacidad de adaptación del sector agroindustrial mexicano.